Los hombros dislocados son muy comunes entre los surfistas jóvenes y adultos.
Los surfistas están continuamente utilizando sus brazos y la parte superior del cuerpo para remar, bucear, despegar, maniobrar y ajustarse al flujo de las olas.
Como resultado, su espalda baja y sus hombros están bajo constante presión. Las lesiones se producen cuando el delgado manguito de los rotadores se desgarra o se estira en exceso, por ejemplo, cuando se está surfeando durante un par de horas sin parar o cuando se hace un wipe out.
Las constantes remadas provocan el desgaste de los hombros.
Desde un punto de vista técnico, lo que ocurre es que el tendón del supraespinoso se pincha y suele provocar tendinitis e inflamación.
Cuanto más se surfea con el hombro inflamado, peor se pone. Finalmente, el tendón se romperá y empezarás a sentir dolor en la parte superior y frontal del hombro.
Los hombros dislocados se producen cuando el brazo está por encima de la cabeza y se rota hacia fuera y se fuerza hacia atrás. Cuando se compara con el hombro bueno, el lesionado mostrará una pequeña protuberancia o bulto.
Un hombro dislocado puede dar lugar a fracturas, pero en la mayoría de los casos, puede arreglarse -reducirse- con relativa facilidad.
Puede ocurrirte a ti o a un amigo surfista en lugares más o menos remotos. En el peor de los casos, la lesión no le permitirá volver a la orilla nadando.
Un hombro dislocado duele mucho. Por lo general, se asocia a un dolor agudo y localizado y debe solucionarse lo antes posible.
Técnicas no médicas para reducir un hombro dislocado
La buena noticia es que existen varias técnicas no médicas para volver a colocar el hombro en su lugar original, que proporcionarán un importante alivio del dolor al paciente en cuestión de minutos.
A menos que haya una fractura, volver a colocar un hombro dislocado en su sitio tiene múltiples ventajas e incluso puede evitar lesiones en nervios y vasos sanguíneos.
Existen varios métodos de recuperación de dislocaciones de hombro.
Las técnicas más utilizadas son la técnica de Stimson (maniobra de rotación escapular) y la técnica de Cunningham.
Pero la rotación externa, el método de Milch, la técnica de Spaso y el proceso de tracción-contracción también solucionarán el problema.
Sólo hay un objetivo: devolver la articulación a su sitio. Y para ello, es primordial que el paciente relaje los músculos y colabore con el procedimiento.
La técnica de Stimson
Una de las formas más populares de fijar un hombro dislocado es realizar la técnica de Stimson:
1. Coloque al paciente boca abajo, sobre una superficie elevada como una cama, mesa o sofá;
2. Deje que el brazo lesionado cuelgue sobre el borde de la superficie sin tocar el suelo;
3. Si está disponible, haga que el paciente tome analgésicos (ibuprofeno) o relajantes musculares (baclofeno o clorzoxazona);
4. Fije un objeto de cinco a diez libras a la muñeca oscilante del paciente o pida a un asistente que tire de su mano hacia abajo con suavidad;
5. Comience a masajear los músculos del hombro para relajarlos y reducir los espasmos;
6. Empuje lentamente el omóplato hacia la columna vertebral con los dedos;
7. Cuando oiga un ruido seco, el hombro está de nuevo en su sitio;
Si la persona es capaz de tocar el hombro bueno con las manos del lado lesionado, todo está bien. Recuerde que este proceso puede durar hasta un par de horas.
La técnica de Cunningham
También hay otra forma de reducir un hombro dislocado. Se llama la técnica de Cunningham:
1. Siente al paciente recto en una silla con el codo doblado a 90 grados junto a su cuerpo;
2. Dígale que respire profundamente y se relaje;
3. Empiece a masajear los músculos del trapecio, pase al deltoides y luego al bíceps;
4. Siga corrigiendo la posición del paciente: «siéntese recto y arquee la espalda»;
5. Cuando oiga un chasquido, el hombro está de nuevo en su sitio;
La técnica Boss-Holzach-Matter
Por último, tenga en cuenta que existe un método de reducción de hombro dislocado autoasistido llamado técnica Boss-Holzach-Matter.
Puede ser tan rápido y eficaz como una técnica administrada por un médico. A continuación se explica cómo hacerlo:
1. Siéntese en una cama con la pierna del lado bueno fuera de la cama;
2. Doble la rodilla del lado del hombro lesionado;
3. Mantenga las manos juntas delante de la rodilla del lado lesionado;
4. Mantenga los brazos lo más cerca posible de los muslos;
5. Comience a inclinar la cabeza hacia atrás lentamente y relájese;
6. Extienda gradualmente los brazos y el cuello;
7. Repita el paso anterior hasta que el hombro vuelva a su lugar original;
Después de sufrir una dislocación de hombro, podría necesitar rehabilitación física, así que consulte a un médico antes de volver al agua.