Si fuera socialmente aceptable, cuando alguien te pregunta por qué estás malhumorada, responder honestamente: «Estoy un poco atrasada»

El estreñimiento es una condición común, especialmente entre las mujeres. Pero eso no hace que sea más fácil hablar de él. Aunque puede que no sea su tema preferido para la noche de chicas o el club de lectura, hay al menos una persona que quiere escuchar todos los detalles de sus síntomas de estreñimiento: su profesional de la salud. Si padece síntomas de estreñimiento, considere la posibilidad de concertar una cita para hablar con él sobre sus movimientos intestinales. Proporcionar detalles sobre sus hábitos intestinales puede ayudar a su profesional de la salud a controlar sus síntomas y posiblemente a descartar problemas potencialmente graves.

¿Qué tipo de detalles quiere su profesional de la salud? La frecuencia de las deposiciones es un buen punto de partida. El horario típico de defecación puede variar de tres veces al día a tres veces a la semana, dependiendo de la persona. Muchas personas experimentan una irregularidad ocasional, pero el estreñimiento se define generalmente como el hecho de tener menos de tres deposiciones a la semana, tener dificultad al defecar o ambas cosas.

Otros signos de estreñimiento pueden ser el esfuerzo, las heces duras o con grumos o las deposiciones incompletas. Algunas personas con estreñimiento también dicen sentirse hinchadas o con molestias abdominales. Es importante mencionar todo esto al médico. La consistencia, el color y la forma de las heces también son reveladores de lo que ocurre en su cuerpo, al igual que el tiempo que lleva con los síntomas, los tratamientos que ha probado, si han surtido efecto o no y si los síntomas vuelven a aparecer o no.

Estos son los consejos comunes que recomiendan los proveedores de atención médica para ayudar a controlar el estreñimiento:

Muévase para poner las cosas en movimiento. El aumento de la actividad física, como caminar o hacer yoga, puede disminuir el estrés y mejorar los síntomas del estreñimiento. Las técnicas de relajación como la meditación, los masajes y el tai chi también pueden ser útiles. Namaste.

Lleve un diario de síntomas. No será tan jugoso como el que escribiste cuando tenías 12 años, pero un diario de síntomas puede ayudarte a identificar los factores desencadenantes, como ciertos alimentos o el estrés, que pueden empeorar tu estreñimiento y el dolor o las molestias abdominales.

Consume fibra. La fibra dietética puede ayudar a engrosar las heces y atraer más agua a las mismas, lo que facilita su evacuación. Entre los alimentos ricos en fibra se encuentran las frutas, las verduras, las legumbres y los cereales integrales.

Hidrátate como un jefe. Beba mucha agua cada día para mantenerse hidratado y promover una digestión saludable.

Consulte los tratamientos de venta libre con su proveedor de atención médica. Existen varios remedios de venta libre para el estreñimiento ocasional, como los laxantes y los ablandadores de heces. Consulte siempre a su profesional de la salud antes de iniciar un tratamiento de venta libre y tenga en cuenta que, aunque estos productos pueden aliviar temporalmente el estreñimiento, no están pensados para su uso a largo plazo.

Consulte con su proveedor de atención médica los medicamentos recetados. Su proveedor de atención médica puede recetarle medicamentos aprobados por la Administración de Alimentos y Medicamentos de EE.UU. para aliviar el estreñimiento y algunos otros síntomas asociados con el síndrome del intestino irritable con estreñimiento (SII-C) o el estreñimiento crónico idiopático (CIC), que es el estreñimiento sin causa conocida.

El impacto del estreñimiento no se limita al cuarto de baño: hay datos que sugieren que las personas con estreñimiento experimentan un deterioro de la actividad y una pérdida de productividad laboral. Además, un estudio reveló que el coste anual del tratamiento del estreñimiento en Estados Unidos era de aproximadamente 235 millones de dólares. Así que hable abiertamente con su profesional de la salud para determinar un camino adecuado para usted.

Es posible que ya haya probado algunos de ellos, así que asegúrese de comentarlo con su proveedor de atención médica.