¿Qué son los cocolitóforos?
Los cocolitóforos son algas unicelulares pertenecientes al fitoplancton, formalmente clasificadas en la clase Prymnesiophyceae. Como cualquier otro fitoplancton, los cocolitóforos viven en gran número en las capas superficiales superiores del océano. Se rodean de pequeñas plaquetas, a menudo con forma de disco, conocidas como cocolitos, que están hechas de carbonato. Los términos «nanoplancton calcáreo» o «nanofósiles calcáreos» incluyen los cocolitos y las ccoesferas de algas haptofitas y los nannolitos asociados, de procedencia desconocida. Como sugiere el nombre del grupo, los nanofósiles calcáreos son pequeños, generalmente de menos de 30 µm de diámetro (los cocolitos suelen tener entre 2 y 10 µm). Debido a su tamaño microscópico y a su amplia distribución, los nanofósiles calcáreos se han hecho muy populares para resolver diversos problemas estratigráficos. Las primeras apariciones registradas son de finales del Triásico (Carniense). Hoy en día los cocolitóforos son un importante fitoplancton en los océanos, se encuentran en depósitos marinos a menudo en grandes cantidades (incluso formando acantilados de tiza), y se utilizan como indicador sensible de los cambios ambientales.
Este grupo de fitoplancton desempeña un papel importante en el ciclo del carbono porque elimina el CO2 de la atmósfera. La reacción química que produce el cocolito también genera dióxido de carbono. Aunque gran parte del gas es aspirado de nuevo por los cocolitos, otra parte se escapa a la atmósfera. A corto plazo, esos gases de efecto invernadero podrían hacer que las capas superiores del océano se vuelvan más templadas y estancadas.
La microscopía electrónica de barrido se ha generalizado y ha mejorado mucho el estudio de los nanofósiles. Gran parte del trabajo sobre la estructura fina y la formación de los cocolitos ha sido posible gracias a los microscopios electrónicos de barrido. Dado que los cristales de calcita que forman los cocolitos suelen tener ejes ópticos orientados de forma diferente, pueden utilizarse patrones de extinción distintivos para su identificación bajo los nícoles cruzados de un microscopio polarizador.