Es algo incómodo de admitir, pero según las estadísticas del Test de Asociación Implícita (IAT), muy pocos de nosotros estamos totalmente libres de prejuicios de una u otra forma. El Proyecto Implícito es un proyecto de investigación a largo plazo con sede en la Universidad de Harvard que pretende medir las preferencias de las personas por determinados grupos sociales en detrimento de otros.
Puede ser difícil determinar si alguien siente prejuicios contra otra persona: no sólo somos buenos para enmascarar nuestros verdaderos sentimientos, sino que incluso podemos no ser conscientes de cuáles son. Para descubrir lo que podríamos estar ocultando, los investigadores de Harvard idearon una forma de cuestionario que mide las asociaciones que hacemos entre «bueno» y «malo», «negro» y «blanco», «gay» y «heterosexual», etc.
Los participantes reciben dos conjuntos de imágenes y dos listas de palabras: una con asociaciones positivas («feliz», «amor»); la otra con negativas («tragedia», «agonía»). Las imágenes y las palabras aparecen de forma aleatoria en la pantalla del ordenador y los participantes seleccionan las palabras que aparecen al mismo tiempo que uno de los conjuntos de imágenes. Se registran sus tiempos de respuesta. Las imágenes serán de personas blancas o negras, hombres o mujeres, jóvenes o ancianos, dependiendo del sesgo que los investigadores estén probando.
Cuando se nos pide que establezcamos un vínculo entre un par que va en contra de nuestras asociaciones implícitas (por ejemplo, «viejo» y «feliz») tardaremos una fracción más de tiempo en superar nuestro sesgo. Cuanto más tiempo tardemos en aceptar un emparejamiento, mayor será nuestro sesgo.
Más de 4,5 millones de personas han realizado alguna versión del test online, y los datos recogidos hasta ahora indican que la mayoría de nosotros tenemos una ligera preferencia por nuestra propia raza, y que más del 80% tenemos un sesgo contra las personas mayores.
Los críticos del IAT argumentan que el test es un indicador más preciso de nuestra familiaridad con los diferentes grupos sociales, más que una medida del sesgo (podríamos tardar más en asociar «amistoso» con «asiático» si no conocemos a nadie asiático), pero el debate continúa. Puedes hacer el test tú mismo en implicit.harvard.edu.
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