La demencia afecta a más de 50 millones de personas en todo el mundo, y cada año se registran 10 millones de nuevos casos, según la Organización Mundial de la Salud. Es una enfermedad que provoca un deterioro mental de la memoria, el pensamiento, el razonamiento y la capacidad del individuo para realizar las actividades de la vida diaria.
Aquí tienes 10 señales que puedes notar al principio de la aparición de la demencia en amigos o familiares:
- Signos tempranos de demencia
- Cuándo verá los signos de demencia
- Qué hacer si nota signos de demencia en un amigo o familiar
- Monitorear al individuo
- Hable con un médico
- Cómo se diagnostica
- Qué hacer después de un diagnóstico
- Ejercicio físico
- Actividades calmantes
- Comunicación clara
- Construya rituales y rutinas
- Mantener un calendario
- Planificar el futuro
- Establezca una estrategia de cuidados de la memoria
- Apoyo a los amigos y familiares
- Opciones de vida con apoyo
Signos tempranos de demencia
- Pérdida de memoria
- Dificultad para realizar tareas
- Desorientación general
- Problemas de lenguaje o de articulación
- Dificultad para el pensamiento abstracto
- Disminución de la capacidad de juicio
- Disminución de las habilidades espaciales
- Tendencia creciente a extraviar las cosas
- Falta de iniciativa
- Cambios significativos en el estado de ánimo
Cuándo verá los signos de demencia
Si bien la demencia puede ocurrir en adultos independientemente de la edad, su riesgo aumenta considerablemente después de los 65 años. Entre los afectados, la forma más común de demencia es la enfermedad de Alzheimer, que representa entre el 60 y el 70 por ciento del total de casos.
Como síndrome de salud mental, la demencia tiene un impacto físico, psicológico, social y económico, no sólo en los directamente afectados, sino también en las personas cercanas. ¿Por qué? Porque la demencia es muy difícil de reconocer por el individuo que la padece. Dado que la enfermedad afecta a la memoria y al razonamiento, hace más difícil que los adultos evalúen con precisión su propia situación y se cuiden a sí mismos. Eso hace que muchos amigos y familiares sean los primeros en notar los primeros signos de demencia y los primeros en tomar medidas.
Cada uno de los signos anteriores está sujeto a interpretación. Para algunos, pueden ser simplemente signos del proceso natural de envejecimiento. Sin embargo, si son indicadores tempranos de demencia, ignorar estos signos puede hacer que la demencia quede sin diagnosticar durante un largo período. Cuanto más tiempo pase sin que se diagnostique la demencia, más probable es que las personas que la padecen experimenten un deterioro de su salud que les haga difícil o inseguro seguir viviendo solas. Eso también puede provocar estrés en los amigos y familiares.
Qué hacer si nota signos de demencia en un amigo o familiar
Aunque los primeros signos de la demencia pueden confundirse fácilmente con el envejecimiento normal, es importante reconocerlos tan pronto como aparezcan. Reconocer la posibilidad de una demencia no significa sacar conclusiones precipitadas, sino simplemente tomar las medidas adecuadas para confirmar o descartar una preocupación. Hay varias opciones que puede considerar seguir:
Monitorear al individuo
El primer paso para determinar si alguien tiene demencia es revisar su estado. ¿Su familiar ha tenido un lapsus de memoria momentáneo, pero por lo demás recuerda los acontecimientos recientes con facilidad? ¿O le resulta cada vez más difícil recordar lo que hizo hace unos días? Preste mucha atención a la persona que le preocupa y tome nota de cuántos signos nota, así como de la frecuencia con la que los nota.
Si observa regularmente indicios de demencia, puede ser el momento de abordar el tema con su amigo o pariente. Después, su siguiente paso es obtener una opinión médica profesional.
Hable con un médico
Acudir a su médico es la mejor manera de obtener una respuesta más definitiva sobre si alguien tiene o no demencia. Sin embargo, no es un paso fácil de dar. Acudir al médico puede ser un reto para algunas personas, ya que puede ser difícil reconocer los síntomas en primer lugar. Actuar sobre ellos puede resultar aún más angustioso. Nadie quiere pensar en pasar por un declive mental.
Sin embargo, la visita al médico puede ser mucho más fácil si uno está acompañado por amigos y familiares cercanos. Hable con su amigo o familiar sobre la situación y ayúdele a ver que obtener una opinión profesional es sólo un paso en el proceso. Tanto si se trata de una demencia como de un envejecimiento normal, un médico es la persona más indicada para diagnosticar el problema y aconsejar. Es importante obtener un diagnóstico lo antes posible, ya que puede abrir la puerta a una vida de apoyo o a un cuidado de la memoria que puede ayudar a los adultos con demencia a llevar una vida más fuerte y segura.
Cómo se diagnostica
Una vez que haya tomado la decisión de acudir a un médico, pasará por un proceso de diagnóstico general. El médico evaluará al individuo que muestra síntomas de demencia hablando con él y probando sus capacidades en una serie de funciones. Algunas de estas pruebas incluyen:
- Pruebas cognitivas y neuropsicológicas para comprobar habilidades como la memoria, la orientación, el razonamiento, el juicio, las habilidades lingüísticas y la atención.
- Evaluación neurológica para la memoria, el lenguaje, la percepción visual, la atención, la resolución de problemas, el movimiento, los sentidos, el equilibrio y los reflejos.
- Escáneres cerebrales como el TAC y la resonancia magnética para comprobar la existencia de accidentes cerebrovasculares o tumores, o un escáner PET utilizado para detectar el Alzheimer.
- Pruebas de laboratorio que determinan las deficiencias vitamínicas que pueden perjudicar el funcionamiento mental.
- Evaluación psiquiátrica para evaluar si otras condiciones de salud mental están contribuyendo a los síntomas.
Qué hacer después de un diagnóstico
Su médico puede no encontrar evidencia de demencia en la evaluación. Eso es una buena noticia y probablemente les tranquilizará tanto a usted como a su familiar. Sin embargo, si sigue notando un deterioro físico o cognitivo que dificulta las tareas cotidianas -incluso si es un resultado normal del envejecimiento- puede considerar un entorno de vida con apoyo, como la vida asistida, para aliviar las dificultades. Las comunidades de vida asistida pueden proporcionar la asistencia que las personas necesitan para poder llevar el estilo de vida que desean.
Desgraciadamente, también existe la posibilidad de recibir un diagnóstico de demencia, pero se puede hacer mucho para ayudar a las personas con demencia a vivir bien a lo largo de la progresión de la enfermedad. Su médico le ayudará a determinar si es necesaria alguna medicación, además de ayudarle a evaluar las capacidades del individuo y sus necesidades de cuidados. En muchos casos, las personas con demencia pueden llevar una vida independiente durante años después del diagnóstico, y seguir llevando una vida satisfactoria en comunidades de apoyo incluso después de que ya no puedan vivir solas.
A continuación se presentan algunos cambios en el estilo de vida que pueden ayudar a las personas con demencia a mejorar su bienestar.
Ejercicio físico
Aunque el ejercicio físico es generalmente beneficioso para las personas de todas las edades, puede ser especialmente útil para quienes viven con demencia. Los principales beneficios del ejercicio radican en el desarrollo de la fuerza física, la mejora del equilibrio y la garantía de la salud cardiovascular general. Los síntomas como la inquietud también pueden moderarse hasta cierto punto, ya que el cerebro vuelve a concentrar su energía en completar con éxito las actividades del ejercicio.
En términos de prevención, hay un creciente cuerpo de literatura que argumenta que cuando se combina con una dieta saludable, el ejercicio puede desempeñar un papel en la protección del cerebro de la aparición temprana de la demencia también. En el caso de las personas que ya padecen demencia, las investigaciones han señalado el papel del ejercicio en la ralentización de la progresión del deterioro cognitivo.
Actividades calmantes
Fomentar las actividades físicas que se centran en el bienestar físico integral de la persona o introducir aficiones como la jardinería o el canto que pueden ser mental y emocionalmente terapéuticas. Lo más importante es que la actividad sea agradable. Esto ayuda a centrar la atención en las habilidades existentes de su amigo o familiar, en contraposición a las tareas que se han vuelto más desafiantes. Estos ejercicios también pueden ser una experiencia de unión. Reducirán la ansiedad a la vez que crearán una relación más sólida entre la persona con demencia y quienes la rodean.
Comunicación clara
Cuando se intenta comunicar una frase o una idea a una persona con demencia, suele ser útil hacerlo lentamente y presentando un concepto básico cada vez. Utilice gestos y puntos para simplificar sus descripciones y sea paciente cuando espere a que los demás procesen y comuniquen una respuesta. Introduzca este tipo de comunicación cuando note que al individuo le resulta más difícil comprender ideas, pensamientos o planes sencillos.
Construya rituales y rutinas
La noche suele ser el período más difícil para los individuos con demencia. El aturdimiento, o la confusión nocturna, suele aparecer en las etapas medias y tardías de la demencia, pero puede afectar a cualquier persona con la enfermedad. Establecer algún tipo de ritual rutinario antes de irse a la cama puede resultar calmante y terapéutico para las personas con demencia. Una rutina ayudará a centrar la atención y proporcionará una estructura.
Cuando se desarrollen estas rutinas, es importante tener en cuenta que su propósito es tranquilizar a su amigo o familiar. Sería aconsejable alejar la atención de los ruidos fuertes procedentes del televisor o de la conversación en el salón, por ejemplo. Dejar una luz nocturna encendida también puede evitar la desorientación a última hora de la noche. Limitar la cafeína, desaconsejar las siestas y ofrecer oportunidades para hacer ejercicio durante el día puede aliviar aún más la inquietud nocturna.
Mantener un calendario
Un calendario puede ayudar a las personas afectadas a recordar los próximos acontecimientos, las actividades diarias y los horarios de la medicación.
Planificar el futuro
Es importante que las personas afectadas desarrollen planes a largo plazo con sus allegados mientras aún puedan hacerlo. La planificación puede identificar los objetivos para el cuidado futuro y establecer los roles que las personas van a desempeñar en el viaje. Los grupos de apoyo, los asesores legales, los miembros de la familia y otras personas pueden ayudar. Las personas con demencia y sus familias deben tener en cuenta las cuestiones financieras, la seguridad, las preocupaciones de la vida diaria y las opciones de cuidados a largo plazo.
Establezca una estrategia de cuidados de la memoria
La demencia hace que la memoria y las capacidades cognitivas de una persona disminuyan constantemente. Esto hace que sea crucial planificar una estrategia eficaz de cuidado de la memoria para ayudar a mantener una calidad de vida significativa a medida que la enfermedad avanza. La persona afectada y sus allegados pueden decidir sobre los entornos de apoyo, la planificación de la asistencia sanitaria y la enfermería. Aunque algunos de estos elementos no sean necesarios durante las fases iniciales, estar preparado puede ayudar a aliviar el estrés.
Apoyo a los amigos y familiares
La demencia es física y emocionalmente agotadora para la persona que padece la enfermedad y para sus amigos, familiares y cuidadores. Los sentimientos de rabia y culpa, frustración y desánimo, preocupación, pena y aislamiento social son comunes y completamente naturales. Pero ninguna persona con demencia o que apoye a alguien con demencia está sola. Hay múltiples opciones de apoyo y medidas que puede tomar por su cuenta para mejorar el bienestar.
- Aumente su propia comprensión de la demencia leyendo y asistiendo a eventos de aprendizaje de la comunidad.
- Investiga los servicios de apoyo dentro de su comunidad. El cuidado de relevo puede dar a los cuidadores un descanso muy merecido, mientras que los grupos de apoyo proporcionan una poderosa salida emocional y social.
- Llame a la familia, a los amigos y a los miembros cercanos de la comunidad para obtener apoyo.
- Compruebe su salud física y emocional para asegurarse de que es capaz de vivir solo con la demencia o de que puede proporcionar el apoyo necesario a alguien con demencia.
Opciones de vida con apoyo
Ya sea que esté lidiando con la demencia o simplemente esté preocupado por un amigo o familiar que vive solo, hay opciones de vida con apoyo que pueden ayudar. En Lake Park Retirement Community, proporcionamos una serie de cuidados que van desde la vida independiente hasta la enfermería especializada y que ofrecen la asistencia que los adultos necesitan para vivir la vida que desean.
Para nosotros, la vida con apoyo consiste en permitir que todos vivan la vida al máximo. Somos una comunidad de Oakland que se asoma al lago Merritt, con impresionantes vistas de la bahía de San Francisco. Póngase en contacto con nosotros para obtener más información o para visitar la comunidad.