Es la 1 de la mañana y hace 5 grados fuera. La nieve sigue cayendo. Se despierta porque la casa está muy fría. ¿Qué ha pasado? La caldera se ha estropeado de repente. Estos son los pensamientos que pasan por su cabeza:
- Me estoy congelando.
- Los niños se acaban de resfriar.
- ¿Cuánto va a costar esto?
- Realmente debería haber programado una llamada de mantenimiento el otoño pasado.
Prevenga problemas, ahorre dinero, permanezca cómodo
El mantenimiento preventivo rutinario ahorra dinero. No importa si se trata de su coche o de su sistema de climatización. Detectar los problemas a tiempo significa prevenir averías graves o incluso la necesidad de sustituir su horno o aire acondicionado.
Incluso el simple paso de cambiar el filtro de aire con regularidad puede añadir años a la vida de su equipo. Pequeñas tareas como ésta son el corazón del mantenimiento preventivo. Por pequeñas que parezcan, le mantendrán a usted y a su familia cómodos durante todo el año, y le ahorrarán costes de reparaciones importantes.
Cuando invierte en una llamada de mantenimiento anual, le da a un técnico capacitado la oportunidad de inspeccionar las piezas de trabajo de su horno y aire acondicionado. Con su experiencia, puede detectar los componentes desgastados o dañados y sustituirlos. El resultado es una caldera fiable durante los meses más fríos y un aire acondicionado que mantiene su casa fresca incluso cuando hace mucho calor en el exterior.
Un paseo de mantenimiento
HVAC significa Calefacción, Ventilación y Aire Acondicionado. El técnico capacitado de HVAC que viene a su casa para realizar el mantenimiento preventivo revisará todos los sistemas o sólo uno específico, dependiendo de sus necesidades. He aquí una llamada estándar para el horno y para el aire acondicionado.
Inspección del horno en seis pasos
#1. Reemplazará el filtro de aire. Lo ideal es hacer esto cuatro veces al año. Si desea hacerlo usted mismo otras veces durante el año sin llamar a un técnico, pídale que le muestre cómo realizar esta tarea.
#2. Comprobará el termostato para asegurarse de que está bien calibrado. Si no está sincronizado, lo recalibrará. Esto por sí solo puede ahorrarle sustancialmente en las facturas de energía.
#3. Inspeccionará las conexiones y apretará las que lo necesiten, medirá el voltaje y la corriente de los motores y lubricará las piezas móviles.
#4. Revisará el desagüe de condensados de su horno o caldera. Un desagüe obstruido puede causar daños y afectar a la humedad de la casa.
#5. Comprobará los controles del sistema para asegurarse de que funcionan correctamente y con seguridad.
#6. Le hará saber si necesita hacer reparaciones, basándose en sus inspecciones. Le explicará cada problema y le dará un precio por la reparación antes de realizar el trabajo.
Inspección en seis pasos para el aire acondicionado
#1. En primer lugar, comprobará la bobina del condensador, limpiándola con agua a presión o con una limpieza química si está especialmente sucia.
#2. A continuación, comprobará el termostato, haciéndolo funcionar de 5 a 10 minutos a una temperatura más baja para asegurarse de que alcanza la presión de funcionamiento necesaria.
#3. El técnico realizará una lectura del bulbo húmedo.
#4. Para asegurarse de que su sistema de aire acondicionado está cargado correctamente, inspeccionará el recalentamiento y el subenfriamiento.
#5. Se asegurará de que el amperaje del motor cumple las especificaciones del fabricante.
#6. Si encuentra algún problema en los pasos 1 a 5, realizará las reparaciones después de informarle de cuáles son y del coste de cada una.
Manténgase seguro, cómodo y ahorre mucho con una inspección anual de todos sus dispositivos de climatización.