Este estudio examinó los resultados de 455 jóvenes que ingresaron en el Programa de Vida Independiente Lighthouse durante el período 2001-2006. En promedio, los clientes fueron admitidos poco antes de cumplir los 18 años y permanecieron en el programa durante algo menos de 10 meses. Al ser dados de alta, el 60% había completado la escuela secundaria/el programa GED, el 31% estaba empleado y el 33% tenía una vivienda independiente. Sin embargo, hubo diferencias significativas en los resultados entre los subgrupos. Los clientes que presentaban cuatro o más factores de riesgo clínicos tenían menos probabilidades de haber completado la escuela secundaria/el programa GED, menos probabilidades de estar empleados y menos probabilidades de tener una vivienda independiente que los que presentaban menos factores de riesgo. Los que permanecieron en el programa durante menos de 6 meses tenían más probabilidades de completar la escuela secundaria, pero menos probabilidades de estar empleados y de tener una vivienda independiente que los que permanecieron en el programa durante más tiempo. Los clientes que entraron en el programa a los 19-20 años mostraron resultados significativamente mejores que los clientes más jóvenes. Las mujeres tenían más probabilidades de vivir de forma independiente en el momento del alta, mientras que no se encontraron otras diferencias de género o grupo racial/étnico en los resultados. Estos datos descriptivos pueden proporcionar datos de referencia útiles para la planificación, el desarrollo, la administración y la formulación de políticas de los programas de vida independiente.