El gecko leopardo es un reptil crepuscular e insectívoro. El papel de la lengua en este reptil es fundamental para la captura e ingestión de presas y no está relacionado con la limpieza de los ojos como es habitual en otros gecos. La lengua alargada puede dividirse en una lengua anterior con un ápice ligeramente bifurcado y una lengua posterior. La microscopía electrónica de barrido demostró que hay varias papilas diferentes en la superficie dorsal, foliadas y en forma de cúpula en la lengua anterior, que se vuelven más gruesas y robustas con espacios interpapilares reducidos en las partes laterales. La lengua posterior se caracteriza por la presencia de papilas anchas y foliadas con márgenes dentados y fisuras profundas de la mucosa. La microscopía óptica mostró la presencia de un epitelio escamoso estratificado ligeramente queratinizado en el ápice de la lengua anterior, un epitelio escamoso estratificado no queratinizado en la lengua anterior y en la posterior. En la lengua anterior se observaron numerosas células caliciformes mucíparas. Además, se demostró por primera vez en esta especie la presencia de papilas gustativas en la superficie ventral de la lengua y el estudio confocal con láser reveló una fuerte inmunoreactividad para la proteína S-100 en las células sensoriales. Por lo tanto, los resultados obtenidos podrían dar una contribución al conocimiento de la anatomía de la lengua y son una base para eventuales estudios posteriores sobre los hábitos alimenticios en un reptil convertido en una mascota popular.