Antecedentes del descubrimiento

Edad

De 2,4 a 1,8 millones de años

Descubrimientos fósiles importantes

El espécimen clave de esta especie es el cráneo KNM-ER 1470. Cuando fue descubierto por el equipo de Richard Leakey en 1972, no se atribuyó a una especie, sino a un miembro del género Homo. En 1986, un antropólogo ruso dio al cráneo el nombre de especie Pithecanthropus rudolfensis. El nombre del género Pithecanthropus se abandonó posteriormente y se sustituyó por el de Homo.

Otros restos craneales atribuidos a esta especie son los KNM-ER 1802, 1590, 1801 y 3732. Entre los posibles restos de extremidades se encuentran los KNM-ER 1472 y 1481, pero no se encontraron con cráneos, por lo que la atribución es dudosa.

Qué significa el nombre

Homo es una palabra latina que significa ‘humano’ u ‘hombre’. Es el mismo género o nombre de grupo que se da a los humanos modernos, lo que indica la estrecha relación entre esta especie y la nuestra. El nombre de la especie rudolfensis proviene del lugar donde se encontró el espécimen tipo KNM-ER 1470 – Lago Turkana, Rudolph Oriental, Kenia.

Distribución

Se han encontrado fósiles en Urhara, Malawi, y en el Lago Turkana en Kenia.

Relaciones con otras especies

El nombre científico Homo rudolfensis fue propuesto originalmente para el cráneo del espécimen KNM-ER 1470, descubierto en 1972. En su día muchos pensaron que era un miembro de la especie Homo habilis, pero las diferencias con respecto a otros cráneos de Homo habilis se consideraron demasiado grandes.

Al igual que en el caso de H. habilis, existe una gran controversia sobre la clasificación de H. rudolfensis. Se sigue debatiendo si estos fósiles deberían denominarse Homo rudolfensis, Kenyanthropus rudolfensis o Australopithecus rudolfensis, o volver a Homo habilis.

El análisis muestra que esta especie presenta más afinidades con los australopitecos que con Homo. Así que no se sabe con certeza si H.rudolfensis fue ancestral de las especies posteriores de Homo, o si lo fue H.habilis, o si lo fue alguna especie no descubierta.

En 2007, un equipo dirigido por Timothy Bromage, antropólogo de la Universidad de Nueva York, reconstruyó el cráneo de KNM-ER 1470. La nueva construcción tenía una mandíbula saliente más parecida a la de los simios y un cerebro de menor tamaño. Afirman que esta nueva reconstrucción lo hace más parecido a otros especímenes de Homo habilis.

El debate sobre Homo habilis y Homo rudolfensis

Los científicos a menudo no se ponen de acuerdo a la hora de dar nombre a los especímenes fósiles. Los nombres científicos pueden cambiarse a raíz de nuevos descubrimientos, diferentes interpretaciones o nuevas líneas de investigación. Homo habilis es una especie muy conocida pero poco definida y las opiniones científicas sobre los especímenes atribuidos varían mucho. Dos ejemplares en el centro del debate son el KNM-ER 1470 y el KNM-ER 1813.

KNM-ER 1470 (descubierto en 1972)

• de unos 1.7 millones de años
• Cerebro grande, de unos 750-800ml
• Dientes no conservados; las raíces y los alvéolos sugieren que eran grandes, como en el Australopithecus, con molares más grandes que otros especímenes de Homo habilis
• Mandíbula superior cuadrada
• Cresta de la frente ligeramente desarrollada
• Cara grande y plana y más larga que la de KNM-ER 1813 (aunque esto se cuestiona ahora)

KNM-ER 1813 (descubierto en 1973)

• de aproximadamente 1.7 millones de años
• Cerebro pequeño, de unos 500 ml
• Mandíbula superior pequeña con dientes de aspecto humano
• Mandíbula superior redondeada
• Cara pequeña y poco plana

Las diferencias entre KNM-ER 1470 y KNM-ER 1813 pueden interpretarse de varias maneras.

• Son sexos diferentes: en igualdad de condiciones, los individuos de cuerpo grande tienen la cabeza y el cerebro más grandes que los individuos pequeños. KNM-ER 1813 puede ser una hembra y KNM-ER 1470 puede ser un macho de Homo habilis. Sin embargo, no se diferencian entre sí del mismo modo que los machos y las hembras de los simios modernos (incluidos los humanos).
• Son especies diferentes: muchos científicos afirman que 1813 y 1470 representan dos especies, o incluso dos géneros. Las sugerencias incluyen el Australopithecus africanus, el Homo habilis y el Homo rudolfensis. El descubrimiento de un cráneo de Kenyanthropus platyops en 1999, y su similitud con KNM-ER 1470, ha llevado a algunos a considerar la reclasificación de KNM-ER 1470 en el género Kenyanthropus.

Características físicas clave

Cerebro

• Tamaño medio de unos 750 cc (mayor que el de los especímenes de Homo habilis)

Tamaño y forma del cuerpo

• La falta general de restos postcraneales dificulta la evaluación del tamaño. Los dientes y cráneos más grandes en comparación con Homo habilis sugieren que puede ser más grande que esta especie.

Mandíbulas y dientes

• grandes molares y molares inferiores más anchos que los de Homo habilis
• coronas y raíces complejas

Cráneo

• cara relativamente plana y larga (aunque reconstrucciones más recientes debaten esto y sugieren que la cara era más protuberante))
• pequeña cresta de las cejas
• falta de crestas y fuertes marcas musculares que se encuentran en los cráneos de australopitecos

Las extremidades

• se desconocen las proporciones de las extremidades debido a la falta de material esquelético
• se supone que eran bípedo pero sin la capacidad de moverse en una locomoción totalmente humana

Estilo de vida

Ambiente y dieta

La zona era predominantemente un entorno de praderas. El clima era cada vez más frío y seco en esta época.

Se han realizado estudios limitados sobre la dieta de esta especie, pero la forma de los dientes y las comparaciones con otras especies sugieren que se comía material vegetal y probablemente carne.

Cultura

Aunque no se han encontrado evidencias arqueológicas asociadas a ningún resto de Homo rudolfensis, vivían en una época en la que se sabe que los antepasados humanos fabricaban herramientas.

Las primeras herramientas de piedra brutas, consistentes en simples picadores, herramientas de núcleo y raspadores, se fabricaron hace ya 2,6 millones de años y se clasifican como tecnología de Modo 1 u Oldowan. No se sabe con certeza quiénes fueron los fabricantes de estas primeras herramientas de piedra. Es posible que los fabricantes de estas herramientas fueran las primeras poblaciones de Homo habilis o que las fabricaran otras especies. Uno de estos candidatos está representado por el fósil AL 666-1, que ha sido denominado provisionalmente Homo sp. (que significa un humano cuya especie se desconoce actualmente).