Brandon Gonzales
Brandon perdió la vida a causa de la gripe H1N1. Brandon no estaba vacunado contra la gripe.
El sábado 24 de octubre de 2009, Brandon Gonzales, un niño sano y feliz de 9 años, corría desde los karts hasta los barcos de choque y los videojuegos en su pizzería favorita. Pero, al día siguiente, después de comer un sándwich, empezó a vomitar. Pronto dejó de hacerlo y se sintió lo suficientemente bien como para ir a la escuela al día siguiente. Al volver a casa, estornudaba y se sentía congestionado, pero por lo demás parecía normal. Poco después, Brandon empezó a quejarse de que le picaba la garganta.
Ese martes, cuando volvió a casa del colegio, empezó a toser y dijo que estaba cansado. Al día siguiente, sus padres lo dejaron en casa y lo llevaron al pediatra. El médico parecía tener prisa y sólo escuchó el pecho de Brandon. Entonces dijo que Brandon tenía congestión y le recetó cortisona.
Una vez que su madre llevó a Brandon a casa, éste se puso aletargado. Una hora más tarde, su temperatura subió a 39 grados y empezó a delirar. Los padres de Brandon lo llevaron a urgencias. Allí el médico le hizo una radiografía de tórax que mostró que los dos pulmones de Brandon estaban llenos de líquido en un 80%. Su nivel de oxígeno también era del 43%. Lo conectaron inmediatamente a un respirador y un equipo de enfermeras y médicos lo rodeó durante toda la noche y hasta la mañana siguiente. El personal pediátrico anunció que estaba estable. En ese momento, Brandon abrió brevemente los ojos y respondió cuando su madre y su padre le hablaron. Pero, 30 minutos después, sus riñones fallaron y el resto de sus órganos se apagaron.
A las 12:46 p.m. del 29 de octubre de 2009, Brandon perdió la vida a causa de la gripe H1N1. Brandon no estaba vacunado contra la gripe.
Ahora, los padres y el hermano pequeño de Brandon se vacunan contra la gripe todos los años. En memoria de Brandon, sus padres produjeron un anuncio de servicio público sobre la gravedad de la gripe y la importancia de educarse sobre la enfermedad.