Por Aidan Whatman / 3 de agosto de 2020
Hoy en día, hay muy pocas series que sean tan queridas y vueltas a ver como Friends. Con sus legiones de fans y su atemporalidad, parece que esta sit com es más grande y más popular con cada año que pasa, a pesar de que terminó hace dieciséis años.
Friends se estrenó en 1994 y tuvo su último episodio en 2004, y a lo largo de sus diez temporadas los fans vieron con total fascinación cómo Rachel, Ross, Chandler, Mónica, Joey y Phoebe navegaban por la vida con resultados hilarantes, incómodos y conmovedores.
La relación entre Ross y Rachel sigue siendo una de las mayores historias de «sí o no» de la televisión; la evolución de Chandler y Mónica hasta convertirse en una de las mejores parejas de la televisión es constantemente entretenida; y la gran cantidad de inolvidables personajes invitados y subtramas hacen que Friends sea una serie con mucho que amar, siempre divertida y llena de contenido relacionable y conmovedor.
Sin embargo, no es una serie perfecta. De hecho, está muy lejos de serlo. Como todas las series, hay algunos fallos que son difíciles de ignorar, como un mal desarrollo de los personajes, terribles tramas secundarias, chistes pobres y conflictos frustrantes.
Todas las temporadas son divertidas, seguro, pero algunas carecen de la consistencia narrativa de otras en el recorrido de la serie.
Temporada Nueve
Muchos coinciden en que la Temporada Nueve es la más débil de la serie. A pesar del nacimiento de Emma, y el papel de Christina Applegate como hermana de Rachel, Amy, hay un montón de arcos mal aconsejados que eclipsan los momentos más fuertes de la temporada.
Entre bastidores, se daba por hecho que ésta sería la última entrada de la serie, y por eso los guionistas hacían todo lo posible por atar la historia de la pandilla. Por ello, Chandler se muda a Tulsa y Phoebe se encuentra en una relación comprometida con Mike. Sin embargo, a mitad de la producción, el reparto acordó volver para una décima temporada sin precedentes, por lo que todo lo ocurrido en la primera mitad de la temporada se barre bajo la alfombra para que todo vuelva a la normalidad.
Además de que este desarrollo lleva a algunas tramas apresuradas y débiles, la novena temporada también consta de algunos de los episodios más cuestionables de la serie, incluyendo uno en el que Mónica piensa que Chandler ve «porno de tiburones», y otro en el que Ross despide a la niñera de Emma por ser «demasiado sensible». Por si fuera poco, la temporada comienza con el horrible arco de la propuesta Joey/Ross/Rachel, y decide lanzar a Joey y Rachel a una relación para el clímax de la temporada. Ah, y Ross finge su muerte.
Todavía hay mucho que amar de la temporada. Ver a Rachel convertirse en madre es un desarrollo satisfactorio de su personaje, y la decisión de Chandler y Mónica de formar una familia es uno de los momentos más conmovedores de la serie. Pero fuera de eso, la Novena Temporada es un poco desordenada.