Entre la obsesión de Internet y la película de terror de 2015 que lleva su nombre, lo más probable es que hayas oído hablar del Krampus, la legendaria bestia navideña utilizada para aterrorizar a generación tras generación de niños. Pero, ¿es Krampus real? La respuesta corta es exactamente la que cabría esperar: Un rotundo no. La figura del Krampus es tan real como su compañero, San Nicolás, es decir, no es real en absoluto si no es por una imaginación hiperactiva. Dicho esto, sin embargo, la leyenda en sí ha existido durante cientos de años, mucho antes de que el Krampus llamara la atención de Internet.
Si necesitas un repaso, esto es lo que debes saber sobre el Krampus. El «Diablo de la Navidad», como se le suele llamar, se originó en la región alpina de Europa, principalmente en Suiza y Austria, hace varios siglos. Sirve de contrapartida a San Nicolás; mientras que el bueno de San Nicolás premia a los niños buenos, el Krampus golpea a los niños traviesos con un haz de palos de abedul y se balancea con una cadena y campanas. Con cuernos, colmillos, dos pezuñas y una lengua larguísima, se parece mucho a los sátiros de la mitología griega. Según National Geographic, se dice que es el hijo de la diosa Hel del inframundo nórdico, por lo que no debería sorprender escuchar que Krampus tiene la desagradable costumbre de meter a los niños en su saco y arrastrarlos al inframundo con él.
Según la revista Smithsonian, Krampus sigue a San Nicolás en la noche del 5 de diciembre, y su «llegada» se sigue celebrando en muchos pueblos alpinos. Pero probablemente no es ahí donde la mayoría de la gente oye hablar del demonio de la Navidad. En cambio, es probable que se haya topado con el Krampus en Internet, donde la leyenda es lo suficientemente popular como para que National Geographic haya registrado su auge el año pasado. Como señala el artículo, Krampus ha sido objeto de un cómic y ha protagonizado su propia película, y un número creciente de celebraciones de Krampusnacht han tenido lugar recientemente en los Estados Unidos.
¿Por qué el creciente interés? Todo lo que tenemos son teorías, por supuesto, pero aquí hay una convincente: «aprovecha un deseo macabro subconsciente que mucha gente tiene y que es lo contrario de la Navidad sacarina con la que muchos de nosotros crecimos», dijo a Smithsonian Jeremy Seghers, organizador de un festival de Krampusnacht en Florida en 2015.
Es comprensible preguntarse si la leyenda del Krampus está basada en una figura real; después de todo, su compañero existió realmente. San Nicolás fue un obispo muy generoso que vivió en lo que hoy se conoce como Turquía durante el siglo III. A lo largo de los siglos, la leyenda de San Nicolás evolucionó hasta convertirse en el querido Papá Noel que conocemos hoy.
Pero aunque San Nicolás existió, el Krampus parece ser totalmente ficticio. Aparte de un único «avistamiento» en un sitio web de noticias paranormales, no hay pruebas de que haya existido nunca en el mundo real, ni siquiera como figura histórica en la que se basó vagamente la leyenda.
Pero, por si acaso, intenta evitar cualquier travesura de aquí a la noche de San Nicolás. Las fiestas ya son lo suficientemente duras como para que un demonio-cabra te golpee con un palo de abedul.
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