Barry Allen es un tipo difícil de vencer. Después de todo, ¿cómo se supone que vas a superar a una persona que puede literalmente correr en círculos a tu alrededor (alrededor del planeta, incluso) en un abrir y cerrar de ojos? Bueno, si eres Clifford DeVoe, no necesitas ser rápido de pies para estar un paso por delante del Hombre Más Rápido del Mundo, sólo necesitas ser rápido de mente.

Y si eso falla, la tecnología puede estar ahí para darte la ventaja que necesitas.

Si has estado viendo esta temporada de The Flash, probablemente ya estés bastante familiarizado con DeVoe. Pero mucho antes de que le hiciera pasar un mal rato a Flash en la acción real, ya era una espina en su costado en los cómics.

¿Quién es?

Creado en 1943 (ALL-FLASH #12, para los que estén jugando en casa), Clifford DeVoe, el Pensador, se enfrentó por primera vez al Flash original, Jay Garrick. Esta encarnación de DeVoe en la Edad de Oro comenzó de forma bastante inocente: era un fiscal de distrito que cayó en desgracia después de fracasar en un caso importante contra un jefe de la mafia.

En lugar de intentar recuperar su dignidad a la antigua usanza, DeVoe decidió que si no podía vencer a los criminales en los tribunales, también podía intentar dirigirlos en las calles. Su educación y su ego le hicieron creer que era el eslabón perdido de los elementos clandestinos de Keystone City y que podía ganarse un nombre pensando en llegar a la cima. Empezó con algo relativamente pequeño, tratando de inventar coartadas y defensas para criminales que se enfrentaban a cargos penales, construyendo él mismo una red y posicionando anónimamente a nuevos aliados. Le fue bastante bien hasta que sus ambiciones se hicieron demasiado grandes para la comodidad de los señores del crimen a los que ofrecía sus servicios.

El repentino nerviosismo y la desconfianza no disuadieron, sin embargo, a DeVoe de su objetivo final. En todo caso, sólo echó más leña al fuego. Comenzó a llamarse a sí mismo el Pensador en serio por esta época, apoyándose en el apodo como un nombre en clave y una tarjeta de visita y volviéndose aún más despiadado en sus maniobras en el inframundo.

…Eso fue hasta que Jay Garrick le puso freno y lo envió a prisión por primera vez, un momento que empujaría a DeVoe por encima del límite, pasando de ser un delincuente medio a nivel de calle a un supervillano en toda regla.

DeVoe comenzó a esforzarse en el desarrollo de nueva tecnología para mejorar lo que creía que era su mayor activo: el poder de su mente. Inventó la «Gorra Pensante», una máquina que le permitía volverse telequinético y telepático, controlando las mentes de sus víctimas incluso antes de molestarse en superarlas en primer lugar.

Sus esfuerzos e inventos le valieron finalmente ser miembro de la Sociedad de la Injusticia, donde continuó intentando superar a Jay Garrick y, finalmente, a Barry Allen. Pero probablemente se podría aventurar que nunca tuvo mucha suerte, por muy amargado y vengativo que se volviera, a la hora de derrotar a cualquiera de los dos Flash.

Sin embargo, a medida que el Universo DC crecía y cambiaba a lo largo de los años, la idea de quién y qué era el Pensador comenzó a evolucionar. Surgieron varios Pensadores nuevos, incluso antes de que DeVoe desapareciera. A principios de los 90, Cliff Carmichael era telepático y podía controlar los miedos de la gente; normalmente se enfrentaba a Firestorm. También estaba Des Connor, que intentó hacerse con el nombre a finales de los 90 como enemigo de Batman.

Pero estos pretendientes al legado no significaban que la historia de DeVoe estuviera acabada. De hecho, las cosas empezaron a ponerse un poco extrañas en los años 90 después de que DeVoe tuviera la oportunidad de formar parte del Escuadrón Suicida. Fue un periodo breve -uno de sus compañeros intentó matarlo, ya sabes cómo es- pero la experiencia provocó un cambio de actitud. Dejando que el mundo creyera que estaba muerto, DeVoe regresó silenciosamente a Keystone City, donde empezó a intentar, por primera vez, utilizar su capacidad intelectual para el bien y no para el mal. Incluso comenzó a fomentar lo que podría llamarse una amistad con Jay Garrick.

Sin embargo, esto también duró poco, cuando a DeVoe se le diagnosticó una forma terminal de cáncer poco después de su rehabilitación. Murió en 1998, en las páginas de THE FLASH #134.

… Pero estos son cómics de superhéroes, después de todo. Después de su aparente muerte, el miembro de la Sociedad de la Justicia de América, Mr. Terrific, recuperó la preciada «Gorra Pensante» de DeVoe y comenzó a utilizar la tecnología para crear una inteligencia artificial, modelada a partir de los patrones cerebrales de DeVoe. A continuación, utilizó la inteligencia artificial para dirigir la nueva sede de la Sociedad de la Justicia (a principios de la década de 2000).

Sólo hay que adivinar cómo se desarrolló todo esto.

Por supuesto, la inteligencia artificial acabó ganando condena y se convirtió en el nuevo Pensador, una manifestación holográfica de DeVoe, modelada a partir de los patrones cerebrales de su Gorra Pensante. Y, al parecer, esta versión tecnológica de él nunca se enteró del cambio de opinión del DeVoe de la vida real antes de su muerte, porque la I.A. DeVoe no perdió el tiempo en volverse rebelde y unirse a algunos de los peores villanos de la JSA.

Así que ahí lo tienen. El Pensador de los cómics podría ser bastante diferente al Pensador que has estado viendo esta temporada en The Flash, pero puede que quieras usar lo que sabes ahora para empezar a desechar esas teorías de los fans y detectar esos #SecretosDCTV. Todavía nos queda media temporada por delante, y como DeVoe te diría felizmente, el Pensador está siempre muy adelantado.

El final de mitad de temporada de The Flash, «Don’t Run», se emite esta noche a las 8 p.m. (7 p.m. CST) en The CW. Asegúrate de visitar DCComics.com después de la emisión del episodio para leer las opiniones del #DCTV Couch Club.