En esta sección:
- ¿Qué es la RGE?
- ¿Tiene la RGE otro nombre?
- ¿Cuán común es la RGE en bebés?
- ¿Qué es la ERGE?
- ¿Qué frecuencia tiene la ERGE en los lactantes?
- ¿Qué lactantes tienen más probabilidades de padecer ERGE?
- ¿Cuáles son las complicaciones de la ERGE en los lactantes?
- ¿Qué es el RGE?
- ¿Tiene el RGE otro nombre?
- ¿Qué frecuencia tiene el RGE en los lactantes?
- ¿Qué es la ERGE?
- ¿Qué frecuencia tiene la ERGE en los bebés?
- ¿Qué bebés tienen más probabilidades de padecer ERGE?
- ¿Cuáles son las complicaciones de la ERGE en los bebés?
- Esofagitis
- Poco aumento de peso
- Complicaciones fuera del esófago
¿Qué es el RGE?
El reflujo gastroesofágico (RGE) se produce cuando el contenido del estómago regresa al esófago. El RGE suele provocar regurgitación -el contenido del estómago sube por el esófago y llega a la garganta o la boca- y regurgitación. La regurgitación y la regurgitación son normales en los bebés, es decir, en los menores de un año.
¿Tiene el RGE otro nombre?
Los médicos también se refieren al RGE en los lactantes como
- indigestión ácida
- reflujo ácido
- regurgitación ácida
- ardor de estómago
- reflujo
- escupir
¿Qué frecuencia tiene el RGE en los lactantes?
El RGE y la regurgitación son comunes en los lactantes. La regurgitación puede producirse una o más veces al día y es más frecuente en los lactantes menores de 6 meses.1 Aproximadamente entre el 70 y el 85 por ciento de los lactantes presentan regurgitación diaria a la edad de 2 meses.2 La mayoría de los niños dejan de tener síntomas de RGE cuando tienen entre 12 y 14 meses.1
¿Qué es la ERGE?
La enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE) es una afección más grave y duradera en la que el RGE causa síntomas repetidos que son molestos o da lugar a complicaciones. Sin embargo, a los médicos y cuidadores les puede resultar difícil determinar si los síntomas de un bebé son molestos y si los síntomas están causados por el RGE o por otra cosa.
Si cree que su bebé tiene RGE, debe llevarlo a ver a un médico o a un pediatra.
¿Qué frecuencia tiene la ERGE en los bebés?
Los expertos no están seguros de la frecuencia de la ERGE en los bebés porque esta enfermedad es difícil de diagnosticar.
¿Qué bebés tienen más probabilidades de padecer ERGE?
Cualquier bebé puede tener ERGE. La ERGE es más común en los bebés prematuros. Los bebés con ciertas enfermedades que afectan al esófago, al sistema nervioso o a los pulmones también son más propensos a padecer ERGE.
¿Cuáles son las complicaciones de la ERGE en los bebés?
Los bebés con ERGE pueden desarrollar complicaciones como esofagitis, poco aumento de peso y complicaciones fuera del esófago. Sin embargo, algunas de estas complicaciones pueden ser signos de otras enfermedades no relacionadas que afectan a los bebés. Los médicos pueden comprobar si hay problemas de salud distintos de la ERGE que podrían estar causando estas complicaciones.
Esofagitis
La esofagitis es una inflamación en el esófago. La esofagitis puede causar úlceras en el revestimiento del esófago y hemorragias. Con el tiempo, la esofagitis crónica puede aumentar la probabilidad de desarrollar estenosis esofágica y esófago de Barrett.
Poco aumento de peso
Los bebés con ERGE pueden escupir la comida con frecuencia o negarse a comer. Estos síntomas pueden hacer que el lactante gane menos peso del esperado o lo pierda.
Complicaciones fuera del esófago
Algunos lactantes con ERGE también tienen complicaciones fuera del esófago, en la boca, la garganta o los pulmones. Estas complicaciones pueden incluir
- la tos
- la laringitis -inflamación de la laringe que puede provocar una pérdida de voz a corto plazo
- la neumonía que se repite
- las sibilancias, un silbido agudo que se produce al respirar
Vandenplas Y. Chapter 10: Gastroesophageal reflux. En: Guandalini S, Dhawan A, Branski D, eds. Textbook of Pediatric Gastroenterology, Hepatology, and Nutrition. Springer International Publishing; 2016:105-130.
Czinn SJ, Blanchard S. Enfermedad por reflujo gastroesofágico en neonatos y lactantes: cuándo y cómo tratar. Medicamentos pediátricos. 2013;15(1):19–27. doi:10.1007/s40272-012-0004-2