Si le han recomendado la cirugía de la vesícula biliar, probablemente se pregunte sobre el proceso de recuperación. Después de todo, aunque se realice con una técnica mínimamente invasiva, sigue siendo una cirugía médica. Afortunadamente, para la mayoría de los pacientes la recuperación de este tipo de cirugía es bastante sencilla.
Una de las mayores ventajas de la cirugía laparoscópica es que el tiempo de recuperación es mucho más rápido y, por lo general, más sencillo que el de las cirugías invasivas convencionales. Debería poder abandonar el hospital el mismo día de la intervención, aunque necesitará que alguien le lleve a casa, y lo ideal es que permanezca con usted durante al menos 24 horas, ya que puede sentir algunos efectos secundarios de la anestesia general.
Los efectos secundarios más comunes que puede experimentar tras la cirugía laparoscópica de la vesícula biliar son:
- Hinchazón y hematomas alrededor de los puntos de incisión, que deberían empezar a remitir en unos días.
- Algunas molestias, que suelen aliviarse con analgésicos de venta libre.
- Náuseas, que disminuyen a medida que la anestesia desaparece por completo.
- Hinchazón, gases y diarrea, a veces acompañados de dolor en el abdomen y los hombros. Estos últimos deberían desaparecer en unos días y son el resultado del gas utilizado para inflar su vientre durante el procedimiento, mientras que los primeros pueden tardar varias semanas en regularse.
En total, se suele tardar entre una y tres semanas en recuperarse de la cirugía laparoscópica de la vesícula biliar, pero esto puede variar de un paciente a otro.
Consejos principales para recuperarse de la cirugía laparoscópica de la vesícula biliar
¡Esté preparado! Su recuperación será mucho más sencilla si se asegura de que su casa está limpia y libre de trabajos urgentes, y se abastece de todo lo que pueda necesitar mientras se cura, como medicamentos para el dolor y comidas preparadas de antemano.
Planifique el apoyo para su recuperación. Es muy difícil saber exactamente cómo se sentirá durante su proceso de recuperación antes del evento. Al tener amigos o familiares a la espera para apoyarle, puede estar seguro de que no se presiona demasiado antes de tiempo, lo que podría hacer que su recuperación sea más larga.
Evite llevar ropa que le presione el vientre. La ropa cómoda es una necesidad cuando se está recuperando. Elija prendas que se estiren y tengan un material suave.
Los pequeños movimientos dan mucho de sí. Moverse puede parecer lo último que quiere hacer si está dolorida y cansada, pero levantarse y moverse cada pocas horas acelerará el proceso de curación y ayudará a reducir la acumulación de gases en su vientre. Incluso si es sólo para hacer una taza de café, levantarse y moverse realmente ayuda.
Tome tiempo libre del trabajo. Usted realmente no quiere volver al trabajo demasiado pronto, ya que apresurarse a volver antes de que esté debidamente curado puede causar complicaciones o hacer que su recuperación sea más larga. Su cirujano le dirá cuánto tiempo debe ausentarse del trabajo. Si es autónomo o no tiene una baja por enfermedad pagada, asegúrese de que sus finanzas están cubiertas mientras se cura.
Si está preocupado, llame a su médico. Usted conoce su cuerpo mejor que nadie. Si le preocupa que algo no esté bien, o si tiene un dolor que no desaparece, no tenga miedo de llamar a su médico para que le aconseje.