Llego pronto al local londinense en el que Matthew Hussey está a punto de obsequiar a la audiencia con sus técnicas registradas para «conseguir al chico». Aún faltan 30 minutos para que empiece el espectáculo, pero dentro del auditorio todos los asientos están llenos. Los altavoces hacen sonar «I Want You Back» de The Jackson 5 y «How Long» de Charlie Puth. Las acomodadoras, un ejército de vaqueros ajustados y camisas blancas, me chocan los cinco al pasar. «¡Esto te va a cambiar la vida!», me dice una, rebosante de energía. La sala está repleta de cientos de mujeres, desde veinteañeras hipsters hasta señoras de 60 años deseosas de escuchar a Hussey, cuya combinación de franqueza y encanto le ha convertido en una especie de «Nuestro hombre tras las líneas enemigas». (La guerra son las citas, las líneas enemigas son los hombres. Todos los hombres.)

Al lado mío está Anna, de 23 años, que descubrió a Hussey a través de sus populares vídeos. «Me gusta su sinceridad», explica, y el hecho de que articule de forma sucinta lo que ella está descubriendo en las citas: reforzados por el banquete de opciones disponibles en las aplicaciones de citas, muchos hombres se tambalean en la categoría de compromiso. Para mí, una mujer soltera de -Cristo, lo diré- veintitantos años, los comentarios de Anna suenan a verdad. Y ninguna de nosotras está sola. Según Tinder, en Australia hay 3,5 millones de personas que hacen swipe a diestro y siniestro con imprudente abandono. En el último censo de finales de 2016, casi una cuarta parte de los australianos vivían en hogares de solteros, una cifra que se prevé que aumente en un 63% para 2036. En Estados Unidos, y en muchos otros países, hay más personas solteras que nunca.

Hussey está aquí para hacer algo al respecto. A las doce en punto, sale al escenario en medio de un estruendoso aplauso reservado normalmente a los pequeños lóticos del pop.

«¿Quién está soltero? Manos arriba», se dirige al público. Aproximadamente la mitad de la sala responde. «¿Quién no está seguro de tener una relación?» Pregunta. El público ruge de risa y casi la mitad de la audiencia levanta la mano. Una mujer frente a mí levanta ambas en el aire, moviendo los dedos. Hussey sonríe beatíficamente a la sala. «¿No lo resume todo?»

Tímido e introvertido cuando crecía en Essex, Inglaterra, a los 11 años Hussey empezó a tomar prestados los libros de autoayuda de su padre sobre cómo conectar con la gente. Aplicó los consejos primero con sus profesores en la escuela y luego en su trabajo a tiempo parcial como DJ. Al final de su adolescencia, empezó a trabajar como entrenador de vida, orientando a los hombres sobre cómo hablar con las mujeres. Pero cuando cambió de rumbo y empezó a trabajar con mujeres en 2008, el negocio despegó de verdad. Dos años más tarde, empezó a publicar en YouTube, atrayendo a más de 1,3 millones de suscriptores y 212 millones de visualizaciones de sus ágiles clips de consejos para citas. En 2013, publicó su libro más vendido en el New York Times, Get The Guy. Luego vinieron las giras en directo, que enviaron a Hussey por todo el mundo, predicando su mensaje a más de 100.000 fans. Entre sus clientes se encuentran Christina Aguilera, para quien trabajó como coach de vida, y Eva Longoria, que quedó tan impresionada con su mensaje que lo contrató como casamentero en su programa de citas de 2013 Ready for Love.

Muchos de los contenidos de Hussey son gratuitos, pero para muchos no son suficientes. Es entonces cuando hay que empezar a pagar. Los eventos en vivo parten de 30 dólares, el retiro bianual de cinco días en Florida cuesta 5.350 dólares. Para los clientes más exigentes, cobra 14.265 dólares la hora por una sesión de coaching individual.

Actualmente, es el experto en citas del reality show de Channel Seven The Single Wives. Es el último de una serie de programas que aprovechan nuestra obsesión colectiva por el romance. El amor como construcción de la cultura pop está en auge, y es en parte porque nuestras propias vidas de citas se han vuelto muy complicadas. Hay un sinfín de aplicaciones y plataformas para conocer a gente, pero también tienen sus propios problemas. Cada semana aparece una nueva palabra de moda en el mundo de las citas: «ghosting», «breadcrumbing», «orbiting», «zombieing» (cuando una ex pareja regresa aparentemente de entre los muertos y vuelve a entrar en tu vida con el mensaje universal «¿Estás bien?»). Hay más opciones que nunca, pero esto fomenta la indecisión y permite que proliferen los fóbicos al compromiso.

La estrategia de Hussey para dominar el campo minado no es innovadora. De hecho, es radicalmente sencilla: ten confianza en ti mismo, sé proactivo y no pierdas el tiempo con gente que no está interesada en ti. Se trata de un cóctel de autoafirmación, intrepidez y un radar de mentiras que ha calado en los millones de mujeres que consumen sus contenidos cada día. Si vas a «conseguir el chico», Hussey sugiere eliminar de tu vida a la «gente de poco valor».

«En cierto modo, el panorama ha cambiado», dice. «Mucha gente está en esas aplicaciones… y cuando siempre puedes confiar en un nuevo mensaje en una aplicación de citas, no tienes el mismo hambre de ir a hablar con esa persona en la vida real. «Pero lo que no ha cambiado es la naturaleza humana», añade. «Así que si sigues siendo bueno en una habitación, si eres encantador, si tienes mucho a tu favor y eres curioso… vas a seguir ganando». (Hussey suele hablar así. Para él, el juego de las citas es un juego literal, y conseguir el chico equivale a un triplete en la Copa del Mundo de fútbol). «Y por eso creo que las viejas habilidades», con las que se refiere a la confianza en sí mismo y el flirteo, «son un valor añadido hoy en día».

La primera vez que me encuentro con Hussey es después del programa en directo. Durante más de dos horas, el público está absolutamente fascinado, con los ojos pegados a su cara. Cuando todo termina -el momento de «¿fue bueno para ti?»- claman desesperadamente por estar cerca de él, para tomarse un selfie o contarle cómo ha impactado en sus vidas más personales e íntimas.

Emma, de 39 años, fue al retiro de Hussey hace dos años. «Sobre el papel debería estar contenta con mi vida. Tenía un gran trabajo, un bonito piso, una pareja», dice. «Pero me faltaba algo». Escatimó y ahorró y se subió a un avión a Florida. «Mi novio pensaba que iba a volver y a romper con él. Durante un tiempo no nos entendimos… Pero lo superamos gracias al retiro y ahora somos más fuertes que nunca. Le dije a Matthew: ‘Me has cambiado la vida'»

Yo tampoco soy inmune a la esclavitud. Espero a un lado con la asistente de Hussey, que promete que me presentará una vez que la multitud se calme. Quiero preguntarle cómo debo mantener la moral de las citas después de serpentear a través de una relación fallida tras otra. ¿Cómo puedo evitar volcar todas mis energías en el tipo de hombres que Hussey definiría como parejas de «bajo valor»?

Hablo un poco con Lara, una devota de Hussey. Ella admite que actualmente está involucrada en una «casi relación» que Hussey desaprobaría, y quiere ir al retiro por segunda vez para ayudarla a corregir su rumbo.

Nuestra conversación se interrumpe cuando el hombre mismo pasa, rodeado por un equipo de guardias de seguridad. «Hoy hablamos, ¿no?», dice, mirándome a los ojos. «Genial». En unos segundos ya ha pasado junto a nosotros, las mujeres le siguen mientras sale del edificio.

La segunda vez que me encuentro con Hussey está conduciendo hacia su casa desde el programa en directo. No hay descanso para un gurú de las citas en esta época de campos de minas románticos. Hussey va de camino a grabar un seminario web para suscriptores online desesperados por conocer el secreto de las relaciones duraderas.

La pregunta más común que le hacen a Hussey es la siguiente: «¿Cómo puedo conseguir más de un tipo que no está invirtiendo en mí?» Viene en una variedad de formas, ya sea sobre el ghosting, conocer a la familia, una segunda cita. Pero la necesidad esencial es la misma: quiero más. Y este hombre no me lo está dando.

«Hay tanto énfasis en conseguir que alguien haga más que, en el fondo, no lo está intentando», dice Hussey. «La forma de conseguir que otra persona haga más por nosotros es centrarnos en cómo ser lo más atractivos que podemos ser». No se refiere a lo físico, sino a lo emocional. ¿Hasta qué punto tienes confianza en ti mismo? ¿Cuánto amas tu vida? ¿Cómo de alta es tu autoestima? ¿Cuánta satisfacción obtienes de tu trabajo, tu familia, tus amigos, tus pasiones? «Eso es lo que podemos controlar», dice Hussey. «Nunca vamos a controlar lo que alguien nos da».

Hussey tiene 31 años. Lleva más de una década haciendo esto. Recuerda que cuando tenía 24 años grabó un vídeo sobre cómo superar las rupturas y un espectador se le acercó y le preguntó: «¿Alguna vez te han roto el corazón?»

Admite que su forma de actuar puede haber sido un poco simplista. «Creo que a medida que he ido envejeciendo me he vuelto más paciente con el dolor de la gente porque he sido humilde con mis propias experiencias a lo largo del tiempo»

Ha tenido sus propios desengaños amorosos y largos periodos de soltería. Hace cinco años, Hussey decidió dejar Londres y mudarse a Los Ángeles, lo que supuso un éxito profesional pero un aislamiento personal. «Hacía un seminario y volvía a casa y a veces me sentía solo al final de esos días», reflexiona. «Quería conectar con alguien».

Pero esos tiempos han terminado. «Mi equipo ha crecido y estoy viviendo un momento maravilloso en mi vida. Y tengo a alguien; me siento muy afortunado»

Se refiere a Camila Cabello, la cantante de 21 años de aquel inolvidable bop «Havana» y su novia durante el último año. («Siento que nunca he sido más feliz en mi vida», ha dicho Cabello sobre su novio.)

La mayor lección que ha aprendido en el amor es «dejar de competir con tu pareja», explica. «Tu éxito es mi éxito (…) Matar tu ego es algo que aplico a mi relación todo el tiempo».

Es un mensaje que puede encontrar pronto su camino en el trabajo de Hussey. Hasta ahora, se ha centrado sobre todo en el primer arrebato inicial de las citas: conocer a los hombres, despertar su interés, descifrar sus textos, llevarlos de una cita a otra. Pero eso podría cambiar a medida que la propia vida de Hussey evolucione. Después de lo que él ha llamado una «cadena de relaciones de un año», las cosas parecen ir viento en popa con Cabello. En algún momento le gustaría tener hijos. «Las cosas han ido mejorando en mi vida», me dice Hussey.

Al principio del programa en directo, reveló el secreto de una relación sólida: la importancia de encontrar a alguien con quien no sólo tengas una conexión, sino con quien quieras construir un castillo -una vida-. Juntos.

Hussey podría haber encontrado a esa persona con la que empezar a construir su castillo. Y ahora, más que nunca, quiere ayudar a otros a hacer lo mismo. «Salgan y disfruten de la vida, porque la vida es estúpidamente corta», explica sobre la filosofía de su organización. «Se trata de hacer el mundo un poco menos solitario».

Cómo conseguir al chico

según Mathew Hussey

Sé genial.

Sé confiado, curioso

y encantador. Sé

grande, porque es

la única medida

que realmente importa.

Ama la vida porque si

no lo haces, no puedes

tener una vida amorosa.

Conoce tu valor

(y no dejes que nadie

lo socave).