Hay ocasiones en las que no encuentras el momento de visitar el salón para depilarte. Cuando eso sucede, es mejor depilarse en casa en lugar de afeitarse.
Paso 1
Toma una cacerola y calienta un poco de azúcar en ella. Sigue removiendo hasta que empiece a derretirse. Deja que el azúcar se caramelice.
Paso 2 Mezcla unas gotas de miel y limón en la mezcla. Sigue removiendo hasta que la mezcla esté muy caliente.
Mientras remueves, tienes que asegurarte de que la cera tiene una buena consistencia.
Paso 3
Si crees que la mezcla es demasiado espesa, añade un poco de agua y sigue mezclando.
Paso 4
Una vez que la mezcla esté lista, retírala del fuego y mantenla a temperatura ambiente durante una hora aproximadamente y deja que se enfríe.
Paso 5
Una vez que la cera se haya enfriado, coge un recipiente de lata y refrigérala.
Beneficios de usar cera casera
– En comparación con las que hay en el mercado, una cera casera tiene varios beneficios. Aquí hay algunos.
– Dado que la cera está hecha con ingredientes naturales, hace que su piel sea suave y brillante.
– No es probable que desarrolle ninguna erupción cutánea o infecciones mediante el uso de cera casera.
– Eliminará el pelo, así como también hidratará su piel.
– La cera casera disminuye la producción de pelo, por lo que la próxima vez que se depile, se dará cuenta de que el crecimiento del pelo se ha reducido considerablemente.
– Exfoliará tu piel y también abrirá los poros de tu piel para permitir que la suciedad salga.
– Cómo cuidar tu piel después de la depilación
– Aplica siempre una crema hidratante después de que hayas terminado de depilarte.
– También puedes mojar la piel utilizando un paño húmedo para que se mantenga nutrida y no se seque inmediatamente.
– Evita salir demasiado al sol después de la depilación. En caso de tener que hacerlo, use siempre un protector solar.
– Evite tomar duchas de agua tibia o caliente después de haberse depilado. Esto le quitará los aceites esenciales.
– Antes de acostarse por la noche, aplique una loción nutritiva en la zona para que su piel se mantenga hidratada.
– Si la zona empieza a picar o se pone roja, aplique polvos de talco para reducirlo.
– También puede probar a aplicar un cubito de hielo en la zona afectada para reducir el enrojecimiento.
Visite a un dermatólogo si el problema persiste.