La participación en la actividad física se ha conceptualizado históricamente a nivel individual con un fuerte énfasis en las personas aparentemente sanas. Sin embargo, a finales del siglo XX y principios del siglo XXI, surgió un cambio de paradigma por el que se reconocía cada vez más que la participación en la actividad física dependía de factores que residían más allá del control del individuo, siendo necesarios los esfuerzos de programación e intervención a lo largo de la vida, en múltiples entornos y en diversas circunstancias de la vida. Este cambio de énfasis ha creado oportunidades y desafíos para aquellos involucrados en la entrega de programas de actividad física y la investigación. En esta presentación, se revisarán y criticarán los esfuerzos de cambio de comportamiento, promoción y retención de la actividad física. De este análisis crítico surge la comprensión de la naturaleza sindémica de las enfermedades hipocinéticas (es decir, las enfermedades asociadas con el desuso y la inactividad física). El término sindémico se utiliza para dar cuenta de la interacción y la naturaleza sinérgica de la persona, el lugar y el momento en el desarrollo de la enfermedad. En la sindemia no sólo se tienen en cuenta los comportamientos individuales del estilo de vida y los factores sociales, sino también las fuerzas que vinculan esas causas. Para influir realmente en el cambio de las masas, quienes participan en la realización de intervenciones y programas de actividad física no sólo deben abordar cada uno de los comportamientos de estilo de vida y afecciones sociales que contribuyen a las enfermedades hipocinéticas, sino también las fuerzas sociales y ambientales que vinculan esas causas entre sí (por ejemplo, el estigma, el acceso desigual a los recursos).