Fuente: MedicineNet Health News
Nadar es una de las mejores partes del verano. Chapotear en la piscina o en el océano es una gran manera de vencer el calor y divertirse con los amigos y la familia… hasta que te entra agua en el oído.
«La condición es conocida por los médicos como «otitis externa» u «oído de nadador», dice la autora de MedicineNet, Melissa Conrad Stöppler, MD. Puede suceder a los niños y adultos, y los resultados de una infección de la piel que cubre el oído externo y el canal auditivo.
«La infección del oído puede ser a corto plazo (aguda) o crónica, que dura por un largo período», dijo.
Puede sentirse como si estuviera bajo el agua, incluso cuando no lo es. Puede ser difícil oír. Incluso puede desarrollar enrojecimiento, picor, sensación de plenitud, drenaje y dolor.
¿Cuál es la solución para el agua en el oído? El Dr. Stöppler ofrece los siguientes consejos:
Consejo nº 1: ¡Secarse con una toalla! Séquese los oídos para eliminar suavemente el agua dentro y alrededor de ellos.
Consejo nº 2: Incline la cabeza hacia un lado para que la oreja apunte directamente hacia el suelo. Deje que el agua salga.
Consejo nº 3: Tire suavemente de los lóbulos de la oreja mientras ésta mira hacia abajo para ayudar a que el agua salga.
¿Todavía tiene agua en los oídos?
Consejo nº 4: Utilizando el ajuste más bajo (¡nada más caliente!) y la velocidad más baja, apunte un secador de pelo hacia el canal auditivo para secarlo. Mantenga el secador a varios centímetros de la cabeza.
Consejo nº 5: Utilice gotas para los oídos de venta libre que contengan alcohol para secar el agua del oído. Sin embargo, evite estas gotas si tiene tubos en los oídos, una infección en los oídos, drenaje en los oídos o tímpanos dañados.
«Las gotas caseras para los oídos que utilizan aceite mineral o peróxido de hidrógeno» también pueden funcionar, dijo el Dr. Stöppler.
Si el agua en su oído persiste, los expertos aconsejan que consulte a su médico. El médico puede evaluar el problema y determinar el tratamiento adecuado.